viernes, 1 de junio de 2012

137. Personajes equivocados

Sólo hace dos días que la conoce, pero Toni ya tiene claro que Lorena es una mujer extremadamente interesante. Mucho más que él, sin lugar a dudas.

Le resulta curioso el hecho de que, siendo objetivos, las mujeres que actualmente forman parte de sus vidas (la de Álex, Javi y la suya propia) son personajes mucho más apasionantes que ellos mismos. En comparación, su grupo de amigos es mortalmente aburrido y falto de interés.

Se da cuenta de que las ha llamado "personajes" y sonríe para sus adentros. Deformación profesional. Como escritor que es, intenta verlo todo desde el prisma de un literato, tratando de reducir sus actuales vidas a una absurda novela por entregas.

Si hiciera eso, si intentara narrar esta historia recurriendo a  la palabra impresa, tiene claro que la trama debería centrarse en ellas. Seguirlas día a día y no sólo en momentos puntuales. Explorar los puntos de vista de Kim, Lorena, Sara... Es lo que casi todo el mundo querría conocer.

Y sin embargo está seguro de que finalmente ellos serían los protagonistas del relato. A pesar de ser los personajes equivocados. ¿O tal vez no lo son?

¿Por qué los desconocidos siempre nos resultan más fascinantes que la gente de nuestro entorno? A lo mejor, se contesta, es precisamente por eso, porque están llenos de misterios e informaciones que desconocemos. Quizás si nos acercáramos a ellos nos resultarían anodinos, aburridos, tristes.

Si lo supiéramos todo de las chicas, tal vez se convertirían en seres caóticos y anodinos. Y entonces Javi, Álex y él mismo se convertirían en los robaescenas. El sueño de quienes, hartos de sus propias vidas cotidianas, creen que más allá del horizonte el sol brilla con el doble de intensidad. Sin darse cuenta que la gente de ese lugar, irónicamente, piensa lo mismo de nosotros.



No hay comentarios:

Publicar un comentario